miércoles, 14 de marzo de 2012

Capítulo 66: Alucinado


-          ¿Diga? Hola, Flo. bien, bien.- digo mientras miro a Dani. Él me mira alucinado.- no, estoy en casa. Ya, ya sé que era broma. No te preocupes. Sí, hablamos mañana…
-          Dile que quedemos para cenar mañana.
-          Espera, Flo… ¡¿Qué?!- digo susurrando.
-          Sí. Vamos a contárselo mañana. Esto es una señal, Anna. Estábamos hablando de esto y nos ha llamado. Vamos a ser valientes. Y vamos a contárselo.
-          Dani…- digo mirándole angustiada.
-          Sí, Anna. Venga. No perdemos nada.- dice acariciándome la mano. Suspiro y quito la mano del teléfono.
-          ¿Flo? Sí, perdona. Es que tengo visita. Sí, estuvo Raúl también. Mira… es que… Dani y yo… queríamos saber… eh…. Si… bueno, si… te gustaría cenar mañana con nosotros. No, no pasa nada. Sí, nos apetece. Y así charlamos. Hace tiempo que no lo hacemos. Vale. ¿A las 8?- Dani asiente.- perfecto. Sí. Nos vemos mañana, Flo. Un beso.
-          Bien, ya está hecho.
-          A mí esto no me gusta nada.
-          Anna, no va a pasar nada. Hazme caso. Es mejor ser sinceros. Y así sabe lo que hay. Si le gusta, bien. Y si no, también. Lo único que puede es opinar. Y creo que se decepcionaría más si sabe que le estamos mintiendo. Así, poco a poco, podemos normalizar las cosas.
-          No, si dicho por ti suena todo precioso. Solo te falta el vivieron felices y comieron perdices.
-          No me gustan las perdices.
-          Dani, céntrate. Lo que pasa es que yo adoro a Flo. y no quiero que se haga una imagen equivocada de mí. O que se sienta traicionado o decepcionado.
-          Anna, ¿acaso crees que esto es algo malo?- dice haciendo un círculo entre nosotros.- ¿Estar enamorada de mí te parece algo malo, decepcionante?
-          No, claro que no.
-          ¿Entonces? Lo que le puede decepcionar es que no se lo hayamos contado, pero que estemos juntos es algo precioso que nadie tiene derecho a juzgar…
-          Ya…- digo sonriendo. Cuando quieres, es taaaan cuqui. Me acerco y le beso. él en seguida me responde y nos mueve hacia mi habitación.- no pierdes el tiempo.
-          Es que en esto estábamos cuando nos interrumpió Raúl.- dice riéndose. Yo también me río mientras le empiezo a quitar la ropa…

Me despierto antes de que suene el despertador. Dani sigue durmiendo, y yo, después de admirarle, me levanto. Me doy una ducha y cuando salgo sigue durmiendo. Me encanta verle ahí echado en mi cama. Salgo y me pongo a preparar el desayuno. Mientras estoy concentrada mirando las tostadas, pensando en todo lo que se nos viene hoy, alguien me abraza por la cintura y me besa el cuello.
-          Buenos días.
-          Buenos días.- digo sonriendo.
-          Estás madrugadora, algo raro en ti.
-          Estoy nerviosa.
-          No tienes que estarlo.- dice dándome la vuelta en el abrazo. Le rodeo el cuello con mis brazos.
-          Ya… pero no puedo evitarlo.
-          Pues disimula, que hasta la cena no tiene que sospechar nada…- dice dándome un beso.
-          Vaaale.- digo dándole otro. Seguimos besándonos pero me acuerdo de las tostadas. Me separo y las quito para que no se quemen. Dani mientras prepara la mesa y nos sentamos a desayunar. Mientras se ducha, hago la cama y me preparo. Salimos y cuando llegamos, tenemos la suerte de no encontrarnos con nadie. Pero llegamos a los camerinos y esta Cris esperando a Dani. Disimuladamente le guiño un ojo y entro en el mío. Leo el guión y salgo a buscar a Dani. No está por ningún lado, así que me uno a Raúl, Juange y Valdi y me quedo con ellos hablando. En maquillaje lo encuentro y hablamos. No nos hemos encontrado a Flo y yo en parte lo agradezco. Pero mi suerte acaba cuando entramos en el comedor y está esperándonos.
-          Si son mis chicos preferidos. Entonces, ¿esta noche cena?
-          Sí. Ya hacía falta una Floren.- dice Dani.
-          La verdad es que sí. Después de que lo propusiera Anna me animé.
-          A mí también me apetece.- digo sonriendo. La comida pasa sin ningún percance y cuando acaba el programa, Dani viene a mi camerino.
-          Voy a casa. Quiero recoger más ropa para llevarla a la tuya y algunas cositas.
-          ¿Te vas a instalar?- digo sonriendo.
-          Algo así.- dice riéndose. Me besa pero se separa muy rápido para mi gusto.- no estés nerviosa, ¿vale? A las 7 y media como muy tarde estoy en tu casa y vamos juntos al restaurante.
-          He estado pensando…
-          No vale echarse atrás.
-          No. Pero ¿si comemos en mi casa? He pensado que en un restaurante es muy delicado. Si se enfada o algo, no quiero que montemos un espectáculo.
-          Anna, no vamos a contarle que hemos asesinado a nadie. No va a montar ningún espectáculo. De verdad, tranquilízate. Él sabe que no puede ir montando escándalos por ahí. De ahí que haya dicho un restaurante. Se tiene que cortar sí o sí.
-          O sea, que estás acojonado también.
-          No, no estoy acojonado. Porque, se ponga como se ponga, me va a dar igual. Yo se lo cuento, para que lo sepa, pero luego si no le gusta, pues lo siento.
-          Vale…
-          Por favor, relájate. Nos vemos luego.- dice dándome un beso más largo que antes. Yo salgo al momento y voy hacia mi casa. Me doy una ducha y me visto. Me siento en el sofá a esperar a Dani y siento como un nudo en el estómago se va haciendo cada vez más y más grande…

domingo, 11 de marzo de 2012

Capítulo 65: El mundo


Dani intensifica el beso mientras empieza a desabrocharme mis pantalones. Nuestras lenguas se entrelazan mientras nos quitamos el resto de la ropa. Nos movemos a mi habitación sin dejar de besarnos y cuando nos tumbamos en la cama suena el timbre.
-          Mierda.- dice Dani- no abras.
-          ¿Quién será?- digo mientras Dani empieza a bajar su mano peligrosamente.
-          Ni idea, ni tampoco me interesa saberlo.- pero vuelven a llamar.
-          Joder.
-          Espera que abro. Quédate ahí.- digo mientras salgo y recojo mi ropa, la de Dani la tiro en mi habitación, ante su mirada expectante, y me dirijo a la puerta.
-          Hola Annita.
-          Hola, Raúl. ¿Qué tal?
-          Bien. ¿estabas ocupada?
-          No, iba hacia la ducha.
-          Ah, perdona. Si quieres vengo en otro momento.
-          No, pasa. Siéntate. – digo sonriendo y cerrando la puerta. Se sienta en el sofá y yo al lado suyo.
-          A ver, quiero comentarte algo. Pero quiero que sepas que no lo he hablado con nadie. De verdad. Es simplemente que prefiero comentártelo antes de que alguien más se dé cuenta.
-          ¿Qué pasa?
-          Ayer por la noche fui a casa de unos amigos que viven cerca de donde vive Dani. Y os vi.
-          ¿A quiénes?- digo, sintiendo dolor de estómago de repente. Ya sé a quiénes se refiere, pero tengo que tantear.
-          A Dani y a ti. Besándoos como si no hubiera un mañana. Y mira que parpadeé y  miré bien. Pero eráis ustedes sin ninguna duda. Y no parecía un piquito de amistad. Os estabais comiendo la boca… la leng…
-          Vale, Raúl. Ya te he entendido.
-          Y me parece genial. Digo, me gustáis como pareja. Eres una chica fabulosa y Daniel también lo es. Pero creo que he hecho bien en no contarlo.
-          Sí, has hecho bien.
-          ¿Es secreto?
-          Algo así.- digo suspirando.
-          Te juro que no he dicho nada. Y no iba nadie del programa conmigo. Pero claro, no os vayáis comiendo la boca por la calle. Puede llevar a interpretaciones.
-          Es que…
-          Era una reconciliación.- dice Dani saliendo de mi habitación.
-          Hola Daniel.- dice Raúl sorprendido. Se dan la mano y Dani se sienta a mi lado.
-          Bueno, entonces todo tiene más sentido.- Dani y él se ríen pero yo sigo mirando hacia el suelo.
-          Anna, no tienes que sentirte mal. Yo te lo he contado…
-          No, has hecho lo que debías. Y muchas gracias por no contarlo. Pero el primero que tenía que enterarse era Flo.
-          Bueno, yo os prometo que no diré nada. Pero si seguís tan… apasionados, deberías daros prisa. Sino, se enterará de otra manera y no creo que le guste.
-          Muchas gracias, Raúl.- dice Dani. Yo afirmo con la cabeza y Raúl se levanta.
-          Bueno, entonces, supongo que… digo que estarías a vuestra… en fin que me largo.
-          Puedes tomarte algo.- digo rápidamente.
-          No, gracias. Seguid a… bueno a lo vuestro.- dice caminando rápido hacia la puerta.- nos vemos mañana.
-          Hasta mañana.- dice Dani riéndose. Raúl cierra la puerta y Dani me mira.
-          Bueno, uno que lo sabe.
-          Joder, y menos mal que es él.
-          ¿Por qué?
-          Pues porque si hubiera sido cualquiera de los de TLJ se habrían muerto. Literalmente.
-          Tienes razón. Bueno, pues se nos acaba el tiempo para hablar con Flo.
-          Sólo a ti se te ocurre besarme así en medio de la calle…
-          Es que me pareció tan increíble verte sentada en la puerta de mi casa, esperando por mí, no pude resistirme.- dice mientras se dibuja una sonrisa en mi cara…
-          Qué cuqui, ¿no?
-          Cuando quiero soy muy cuqui.
-          Ay, si fueras cuqui siempre.- digo riéndome.
-          Entonces perdería la gracia.- dice riéndose el también.
-          Bueno… y entonces… habrá que hablar con Flo, ¿no?
-          Eso parece… Sé que Raúl no abrirá la boca… pero yo quiero contárselo a Flo desde el principio… y si estamos de acuerdo, creo que deberíamos hacerlo cuanto antes.
-          ¿No lo sabe nadie más?
-          Yo no se lo he contado a nadie.
-          Yo tampoco.
-          Pues creo que lo mejor es contárselo ya.
-          ¿Mañana?
-          Sería lo mejor.- dice mientras yo le miro con cara angustiada y sentándome de nuevo en el sofá.
-          No voy a poder decírselo.
-          Anna, no estamos haciend…
-          Nada malo. Ya lo sé. Pero me da mucha angustia contárselo. Siento que no le va a gustar. Y no quiero defraudarle ni que se sienta decepcionado conmigo.
-          No se va a sentir decepcionado contigo. En tal caso, dirá que yo fui quién te seduje o mierdas de esas. Tú quedarás como la inocente.
-          No es gracioso.
-          Sí lo es, Anna.- dice levantándome por el brazo y abrazándome.- el que tú y yo estemos juntos nos incumbe a nosotros dos. Si al resto del mundo le parece mal, ¿qué nos importa? Somos nosotros los que nos queremos y los que queremos estar así. Se lo contamos a Flo porque es nuestro amigo, y le queremos. Pero, sinceramente, me importa bien poco si le gusta que estemos juntos o no. No voy a dejar de estar contigo porque a Flo no le guste. Además, nos estamos adelantando a los acontecimientos, porque no sabemos cómo va a reaccionar.- y le interrumpe el sonido de mi teléfono…

lunes, 5 de marzo de 2012

Capítulo 64: Say what you want


-          Ya, eso le dirás a todas.- digo guiñándole yo también un ojo y entrando. Él se queda rezagado con Flo y yo voy a mi camerino. No tenemos tiempo ni de mirarnos a la cara de lo rápido que tenemos que ir, así que en la entrada, Dani se acerca como siempre pero me da un abrazo más largo y más “apretado” de lo normal. Cuando acaba el programa, Flo me dice que tengo que grabar algo. No me da tiempo a coger mi teléfono y no puedo avisar a Dani. Cuando termino, es ya muy tarde, y estoy súper cansada. Voy directa a mi camerino para cambiarme e irme a casa. Recojo todas mis cosas y salgo. Flo se ofrece a llevarme a casa. Yo miro primero mi móvil, pero no tengo nada. Supongo que le habrán dicho a Dani que tenía movidas que hacer. Salimos y mientras vamos hacia su coche, veo el de Dani. Me quedo sin saber qué hacer.
-          ¿Ese no es Daniel?
-          Ay, pues parece que sí. No me había fijado.- digo mientras intento sacar el teléfono. Dani está dentro escuchando música, y se asusta cuando Flo da un golpecito en su cristal.
-          Joder, Flo. Qué susto.
-          ¿Qué pasa tío? ¿Qué haces aquí?
-          Nada, esperar a la rubia…
-          ¿Vais a volver a salir?
-          Sí, habíamos quedado para tomarnos algo.- digo yo, mintiendo también.
-          Vaya, no os separáis, ¿eh? Pensé que tenías algo con Cris.
-          Sólo somos amigos.
-          Espero que igual que ustedes.- y nos quedamos callados sin saber qué decir.- era broma, chicos. Ya sé que sois amigos. Pasadlo bien.- dice yéndose.
-          Por poco.- digo entrando en su coche.
-          Joder y tanto.- dice mirando por el retrovisor esperando que Flo salga con su coche. Pasa por nuestro lado, nos saluda y se va. Entonces Dani me mira, sonríe se acerca y me da un beso.- hola cuqui.
-          Hola cari.- digo sonriendo yo también.
-          Anda que no has tardado.
-          Ya lo sé. Estoy cansadísima. Además, pensé que te habrías ido.
-          Estuve entretenido con los chicos y cuando se fueron decidí esperarte en el coche. Para que no fueras sola a casa.- dice arrancando el coche y saliendo del aparcamiento.
-          Ya. Para algo más sería.- digo riéndome.
-          Si encima tengo recompensa, pues mejor.- dice riéndose él también. Vamos hasta mi casa, pero no me deja en la puerta, sino que busca aparcamiento.
-          ¿Vas a subir?
-          ¿A qué crees que me refería con lo de recompensa?
-          Ya lo sé, pero ¿no vas a buscar ropa a casa?
-          Ya la traje. Soy un hombre precavido.- dice señalando una bolsa que tiene en el asiento trasero.
-          Joder. Cuando te interesa, claro.
-          Claro. Y tú me interesas.- dice dándome un beso y saliendo del coche. Vamos hacia mi casa, con cuidado de no encontrarnos con Juange y subimos. Nada más cerrar la puerta, Dani me abraza por la cintura y me besa.
-          Creo que deberíamos hablar con Flo.
-          ¿De lo nuestro?- digo mientras me separo un poco.
-          Sí. Estuvimos hablando el otro día, y me dijo que si estaba con Cris. Que no le molestaría. Tanteé y le pregunté que qué pasaría si Cris fueras tú. Y me dijo que le molestaría que no se lo contásemos. Que sabe que nos comentó lo de no salir juntos, pero solamente para que si las cosas no salían bien, no tuviésemos mal rollo. Y viendo lo sincero que fue conmigo, me da rabia mentirle. Además, creo que si lo contáramos, y los demás supieran la verdad, las cosas nos irían mejor. No tendríamos que estar escondiéndonos. Y quizás no nos enfadaríamos tanto.
-          Yo también lo había estado pensando. Flo también me comentó algo. Pero no sé…
-          Ya. Sé que será raro. Y sé que Flo nos hará mil preguntas y nos meterá bastante caña. Pero también creo que se alegrará. Y no estamos haciendo daño a nadie. Nos queremos, ¿qué problema hay?
-          Ya…
-          Mira, hacemos una cosa.- dice acariciando mis brazos y luego dejando las manos agarrando las mías.- se lo decimos a Flo. quedamos para cenar, se lo contamos, le decimos lo que hay. Y cuando Flo se haga a la idea, empezamos a actuar como si no pasara nada.
-          La siguiente tendría que ser Cris.- digo, empezando a encontrarle el sentido a todo esto.
-          Bueno. Pero si quieres, para que no te mate, hablo yo con ella.- dice sonriendo.
-          No tiene gracia. Me va a odiar.- digo suspirando.
-          No te va a odiar. Ya lo hemos hablado. Le molestará, pero se le pasará.
-          No estoy muy segura de eso.
-          Deja de preocuparte por Cris. ¿Acaso no quieres que todo el mundo sepa lo nuestro?
-          Claro que quiero.- digo mientras rodeo su cuello con mis brazos.
-          Pues entonces da igual lo que diga la gente. Nos queremos, y eso es algo bonito que hay que compartirlo.
-          Uish qué cuqui.
-          Cállate.- dice riéndose avergonzado y besándome. Le abrazo fuertemente e intensifico el beso. Dani, encantado, empieza a quitarme el abrigo. Yo le quito su chaqueta y poco a poco nos vamos quitando la ropa. Cuando tiro de su camiseta, Dani nos mueve hacia la pared mientras se la quita…